ir a principal |
Ir a lateral
Me niego rotundamente a hacer mi servicio militar. Y es que levantarme en las mañanas, vistiendo una camisa rotulada con un enorme de SNM y una gorra roja, valdrían la pena si acaso me enseñaran a disparar un arma.
¡No se anticipen! No soy belicista, nada de eso, pero, ¿Cómo me voy a defender si hay algún conflicto en el que México se vea involucrado?
Yo no voy a correr 15 minutos y a hacerme pendejo en la formación, ni a pintar banquetas, ni hacer servicio a la comunidad.
Tal vez conocer sobre armas y disparar no me asegure sobrevivir en una guerra, pero estoy convencido de que ayudaría en algo.
Por ese motivo, le diré a mi amigo en la milicia, que me consiga un arma a bajo precio para así poder practicar, porque cuando la palabra no surta efecto, no quiero que mi último recurso sea esto.
Hace 2 semanas que trabajo en un salón de fiestas, hay eventos de todo tipo, pero principalmente son fiestas infantiles. Dante debió olvidar esta zona del infierno en La Divina Comedia, porque sencillamente soportar los caprichos y berrinches de una panda de escuincles con voz estridente es una tarea que bien podría compararse con 5 horas de reggaetón…un momento, creo que hay algo peor que eso:
(sin contar a los ebrios de sus padres)
Pero nada que una buena cerveza en sábado por la noche no alivie.
(cena de campeones)
A la perrrrgaaaaa...el lunes entro al gym.
¡Oh!, se me olvidaba....Mi patrona esta bien saaaaabrooosaaaaaaaa....Tssssssss.