Estoy considerando muy seriamente la idea de ver MTV, de usar bufandas, de EzKriBir Azi y de vestirme a la moda. Eso va en contra de mis principios, pero hay una muy buena razón para hacerlo.
Según Falso Profeta, yo me hallo en la generación MSN (1992), sin embargo hago el intento por no ser tan descerebrado, solo hago estupideces estándar como lo haría cualquier adolescente ochentero o sesentero, el problema surge cuando toco el tema de enamoramientos, noviazgo, mujeres en general. Hay de dos chiles, ser afeminado seguidor de modas y con peinado fashion (revistas de modas) o ser un pendejo seguidor de modas y con peinado quesque fashion (reggetonero).
Sucede pues que, la chica contemporánea (nacidas en generación MSN) no sabe lo que le conviene, prefiere un vampiro o al galán de telenovela que a alguien que tenga la capacidad de protegerlas y proveerlas en lo que les falte. Prefieren al tipo que se hace manicure, al hombre de manos curtidas por levantar piedras. Prefieren belleza y delicadeza ante fuerza y varonilidad. Prefieren estupidez a razonamiento. Y en el peor de los casos prefieren mujeres a hombres.
No estoy seguro si esto es reciente o ya es cuento pasado, aunque dudo que en épocas revolucionarias las mujeres se vieran atraídas por eso.
Hoy en día, la gloria (y las mujeres) se la llevan ese tipo de personas, y los aburridos como yo tenemos que esperar a encontrar una chica que realmente valga la pena y se de cuenta que le conviene.
A pesar de todo, debo de admitir que es gracioso e incluso ardidamente satisfactorio saber que la relación con su idea del novio semiperfecto no funciono, y que tarde se dan cuenta que la cagaron al dejar ir a un tipo que vale la pena y en su tiempo la pretendió (¿A quién no le ha pasado?).
Al estar escribiendo esto me doy cuenta que en teoría, la delicadeza y estupidez masculina es provocada por la necesidad de conseguir pareja, ¿En los 80´s eran así las mujeres?, curioso.
Seria grato para mi, que estas cuestiones se decidieran en eventos como que quien más bultos de cemento cargara o quien más rápido corta un tronco con hacha, ganara puntos de respeto y así elevar su popularidad con las mujeres, haciéndolo el hombre más codiciado entre ellas. Claro está que aunado a esto debería tener un intelecto razonable, que no sea un cavernario. Mente y cuerpo.
En fin, es un post muy mal elaborado y de bajo nivel quizás, pero que esperaban, soy generación MSN. ¡Ja!
Según Falso Profeta, yo me hallo en la generación MSN (1992), sin embargo hago el intento por no ser tan descerebrado, solo hago estupideces estándar como lo haría cualquier adolescente ochentero o sesentero, el problema surge cuando toco el tema de enamoramientos, noviazgo, mujeres en general. Hay de dos chiles, ser afeminado seguidor de modas y con peinado fashion (revistas de modas) o ser un pendejo seguidor de modas y con peinado quesque fashion (reggetonero).
Sucede pues que, la chica contemporánea (nacidas en generación MSN) no sabe lo que le conviene, prefiere un vampiro o al galán de telenovela que a alguien que tenga la capacidad de protegerlas y proveerlas en lo que les falte. Prefieren al tipo que se hace manicure, al hombre de manos curtidas por levantar piedras. Prefieren belleza y delicadeza ante fuerza y varonilidad. Prefieren estupidez a razonamiento. Y en el peor de los casos prefieren mujeres a hombres.
No estoy seguro si esto es reciente o ya es cuento pasado, aunque dudo que en épocas revolucionarias las mujeres se vieran atraídas por eso.
Hoy en día, la gloria (y las mujeres) se la llevan ese tipo de personas, y los aburridos como yo tenemos que esperar a encontrar una chica que realmente valga la pena y se de cuenta que le conviene.
A pesar de todo, debo de admitir que es gracioso e incluso ardidamente satisfactorio saber que la relación con su idea del novio semiperfecto no funciono, y que tarde se dan cuenta que la cagaron al dejar ir a un tipo que vale la pena y en su tiempo la pretendió (¿A quién no le ha pasado?).
Al estar escribiendo esto me doy cuenta que en teoría, la delicadeza y estupidez masculina es provocada por la necesidad de conseguir pareja, ¿En los 80´s eran así las mujeres?, curioso.
Seria grato para mi, que estas cuestiones se decidieran en eventos como que quien más bultos de cemento cargara o quien más rápido corta un tronco con hacha, ganara puntos de respeto y así elevar su popularidad con las mujeres, haciéndolo el hombre más codiciado entre ellas. Claro está que aunado a esto debería tener un intelecto razonable, que no sea un cavernario. Mente y cuerpo.
En fin, es un post muy mal elaborado y de bajo nivel quizás, pero que esperaban, soy generación MSN. ¡Ja!
